Bien dijo una gran persona que todos y todas cargamos con una maleta de equipaje, donde llevamos nuestro pasado… Dicha maleta determina quienes somos y fija el curso de nuestro viaje…
Hoy me pongo hacer recuento de las cosas que he ido obteniendo a lo largo de mi viaje y es que mi maleta está repleta de recuerdos, ropa, zapatos, libros, pero sobretodo abrigos, ricos y confortables abrigos, cada vez los seleccionaba con más cuidado ya que era con ellos que me iba a resguardar de las tormentas.
Una que otra bufanda, pero sobretodo abrigos… Con una cuidadosa selección escogía los abrigos para la temporada y por qué no, abrigos que pudieran durar toda la vida, bueno eso era lo que prometían ellos, ser duraderos y siempre calientes sin perder su confortabilidad…
Mi equipaje hoy está repleto de cosas que la verdad no creo volver a usar, algunas ya no sirven y otras más bien, me hace daño utilizar… Lastima me da, pero mis abrigos aunque se pueden ver bien, ya no funcionan para mi, sus materiales se han vuelto algo distinto a lo que eran, ya no cubren frío y estoy seguro que no son capaces de conmigo una tormenta soportar…
Mi equipaje pesa ya , mi maleta ya no tiene espacio para más y si no fuera por ti, no me atrevería a nada desechar… Pero como dicen, lo que no sirve, que no estorbe y aunque realmente aprecio dichos exprotectores hoy debo decirles adios…
Te agradezco, ya que es por ti que hoy no siento frío ni temor, es gracias a ti que hoy espero las tormentas de frente y estoy dispuesto a disfrutar la tempestad, ya no ocupo abrigos gastados, sólo te ocupo a ti…
Escalaría montañas si tu me acompañas, derribaría muros si estás conmigo, simplemente dejaría todo por ti y hoy dejo a mis antiguas prendas atrás, algo que por mi solo, no podría hacer…
Sabes, siempre me ha dado miedo una tormenta sin protección enfrentar, por eso llene de abrigos mi maleta, pero hoy me doy cuenta que sólo necesito uno y que mejor no estorbe lo que no sirve ya…
